Nombres a tener en cuenta

La identidad de los mineros rescatados esta semana en Chile impulsa las iniciativas para felicitar a los hombres convertidos en héroes y promocionar las localidades que llevan en sus apellidos.

Las palabras Segovia y Sepúlveda se han pronunciado y escrito esta semana muchas más veces de lo habitual debido a que la noticia en todo el mundo ha sido el rescate de los 33 mineros que han permanecido más de dos meses atrapados a 700 metros de profundidad.

La indiferencia que conllevan a veces las noticias internacionales se ha vuelto en sensibilidad para muchos segovianos al escuchar los apellidos de los rescatados, que revelan la relación, aunque sea lejana, de aquellos hombres con estas tierras.

Uno de los primeros en reconocerlo públicamente ha sido José Luis Lodeiro, presidente de la asociación de vecinos de San Marcos, que ha pedido a las instituciones que tengan un detalle con los mineros, a los que considera “unos héroes”, y cuya vida está cambiando. “Estaría bien hacer que nos visiten porque seguro que no conocían la ciudad por la que llevan su apellido”, asegura Lodeiro.

Por su parte, en el Ayuntamiento de Sepúlveda también se ha comentado esta curiosidad entre los miembros de la Corporación que preside Concepción Monte, quien está valorando la posibilidad de enviar una carta a través de la Embajada española en Chile, para felicitar a los mineros. Uno de ellos, Mario Sepúlveda, ha sido uno de los más reconocidos por haber sido el animador del grupo durante el cautiverio.

La alcaldesa sepulvedana recuerda que en el Ayuntamiento reciben habitualmente correos electrónicos de residentes en países latinoamericanos preguntando por la relación que tiene su apellido con esta villa, de honda raigambre histórica.

El asunto puede tener una más que anecdótica vinculación. Ya el Marqués de Lozoya advirtió de la importancia que Segovia tuvo en el descubrimiento de América, pues aquí se produjo la proclamación de reina de Castilla a Isabel, quien facilitaría luego que Colón llegara al Nuevo Mundo. Y así se ha recordado con el lema de la capitalidad cultural de la ciudad Segovia 2016: ‘Sin Segovia, no luna’.

En los años posteriores a 1492, fueron muchos los segovianos que se desplazaron al continente americano para emprender aventuras de colonización, como las que los mineros han hecho en el subsuelo. Según recuerda Francisco Fuentenebro, cronista oficial de Cantalejo, Segovia fue la provincia que más conquistadores aportó, con 37, para explorar Méjico, Nicaragua y Panamá. A modo comparativo, Madrid embarcó a 18 y Sevilla a 15.

De este modo los apellidos toponímicos son muy habituales en Latinoamérica, donde muchos derivan del nombre del lugar donde vivía, procedía o poseía tierras la persona o familia asociados al apellido.
De este modo resulta más habitual encontrar el apellido Segovia en zonas alejadas de esta provincia, algo que con el paso del tiempo se va reduciendo. Precisamente también esta semana se ha conocido y difundido el apellido del alcalde pedáneo de Tabladillo, Francisco Segovia. Su identidad también ha traspasado la comarca de Santa María la Real de Nieva —otra localidad de enjundia histórica— con la campaña promocional de una multinacional tecnológica regalando teléfonos de última generación a todos sus habitantes.

Ahora falta ver cómo transcurren las cosas. La alcaldesa de Sepúlveda, Concepción Monte, recuerda que las arcas de los municipios no están como para muchos emolumentos, aunque estos mineros se merezcan grandes atenciones. Pero lo cierto es que a estos les está cambiando la vida y también sus cuentas corrientes, pues muchos han puesto ya precio a entrevistas, libros y otras ocupaciones que les ha retirado ya de la dura actividad minera.

Personalidades.-

  • Darío Segovia. De 48 años y con 13 hermanos, fue el vigésimo minero en ser rescatado tras 69 días bajo tierra. Había alertado a su mujer, Yésica Chilla, de que la mina San José "lloraba mucho", por los pequeños derrumbamientos de piedras. Días después la tragedia sepultó a los 33 mineros. Darío Segovia ha revivido viejos fantasmas bajo tierra, su padre estuvo atrapado en una mina durante una semana. Pensaba en dejar el oficio, pero argumentaba que necesitaba dinero para montar la frutería que ansiaba. Hacía horas extras para lograr su objetivo. De hecho, el día en que quedaron atrapados era uno de ellos. Iba a ganar 90.000 pesos (140 euros).

  • Víctor Segovia. También de 48 años se fundió nada más salir en un abrazo con uno de sus familiares y a continuación con el presidente chileno, Sebastián Piñera, que le dio la "bienvenida a la vida". También le saludó el presidente boliviano, Evo Morales, que ha viajó hasta Copiapó para ver al minero boliviano que estaba atrapado. Ha pasado a la historia del suceso porque escribía lo que ocurría dentro y ha anunciado la publicación de un libro sobre lo acontecido. Era aficionado a la música, estaba separado y tenía cuatro hijas con las que mantuvo durante el cautiverio un intercambio de emocionadas cartas.

  • Mario Sepúlveda. De 39 años, ejerció de periodista presentador en la primera grabación bajo la mina, en la que recalcó el valor humano de los mineros. Además se atrevió a criticar a la compañía propietaria de la mina: "Acá se supone que habían condiciones para estar nosotros, cosa que en el momento que pasó esto se nos cortó la energía, se nos cortó la línea de luz y que hoy día se está ocupando para dormir". Hizo de líder del grupo y fue muy combativo. Era representante sindical en otra mina de la misma empresa y preveía algo malo, por lo que su familia decidió suscribir un seguro. “Me solía decir que si una noche no volvía, que reclamase todos nuestros derechos", relataba su esposa Elvira Valdivia.

  • Víctor Zamora. Fue el bromista del grupo y el encargado de transmitir optimismo a sus compañeros.

Ariel Ticona. El apellido castellano lo lleva su esposa Elizabeth Segovia, que dio a luz, durante el cautiverio.

Fuente de la noticia: El Adelantado de Segovia, 18 de Octubre de 2010